Plan de desarrollo: De la formación al aprendizaje

No es un secreto que actualmente tenemos el sistema empresarial más globalizado y dinámico que hayamos visto jamás. La velocidad con que se desarrolla la sociedad en todas las áreas del conocimiento es vertiginosa y los recursos humanos no se quedan al margen.

Antes de iniciar un plan de desarrollo, es preciso reflexionar acerca de algunos aspectos como la estrategia corporativa, la planificación de itinerarios formativos, potenciar metodologías innovadoras y multiplicar el compromiso de los colaboradores.

¿Qué entendemos por Plan de Desarrollo de empleados?

Se trata de un proceso continuo, en el cual quedan definidas en el tiempo las acciones a llevar a cabo para potenciar a los colaboradores de la empresa, detectando las necesidades formativas o potenciando habilidades y competencias.

El Plan de desarrollo profesional debe planificarse mediante itinerarios formativos y acciones definidas en el tiempo, y no cuando surge la necesidad de retener talento en la compañía.

Pasos para diseñar un plan de desarrollo

Los pasos para diseñar un plan de desarrollo son los siguientes:

• Detección de necesidades y definición de objetivos: Todo plan de desarrollo debe establecer metas y objetivos para detectar posibles áreas de mejora y puntos fuertes es de gran utilidad contar un sistema de evaluación del desempeño en las que evaluar competencias y habilidades de los colaboradores, funciones y detectar y definir planes de acción. Se trata del punto de partida y nos permitirá crear un mapa en el tiempo, para ello seguiremos los siguientes pasos:
• Solicitar una autoevaluación de los colaboradores.
• Evaluar las necesidades del equipo y la organización.
• Detectar y analizar las oportunidades de desarrollo, juntamente con los colaboradores.
• Diseño de acciones e itinerarios para potenciar habilidades y competencias: documentado los objetivos, habilidades requeridas y el desarrollo de las competencias genéricas y especificas del puesto de trabajo.
• Diseño de acciones e itinerarios para adquirir conocimientos específicos: la formación sobre aspectos técnicos debe resultar atractiva al trabajador desde un punto de vista práctico y debe inducir a este a su aplicación.

Al ser capaces de encontrar una utilidad a un conocimiento, este asienta en nuestra cabeza junto a las utilidades que de él derivan. A su vez, este conocimiento gana protagonismo en nuestra mente como recurso potencial y será más accesible para futuras nuevas situaciones que requieran el desempeño del trabajador

• Organización, ejecución y seguimiento: será necesario cuidar la comunicación y disponer de los sistemas de gestión necesarios para llevarla a cabo, designando a una persona responsable de la formación.

Es necesario entender el desarrollo profesional como una etapa de adaptación con el objetivo de alcanzar al máximo el potencial de los colaboradores. Ofrecer una proyección de carrera al empleado fomentará la motivación, la satisfacción laboral y el sentimiento de pertenencia en los empleados. Este aspecto quedará reflejado en una gestión eficiente de los colaboradores de la empresa contando con el mejor talento. Asímismo, un buen aprendizaje de los trabajadores debe conllevar una repercusión en su actividad laboral y en la su concepción de esta que acabe por propiciar la competitividad de la empresa y, en última instancia, el retorno de la inversión hacia esta.

En GD Asesoría te podemos ayudar a detectar necesidades, evaluar el potencial de los colaboradores y establecer un plan de desarrollo. Contacta con nuestros profesionales sin ningún compromiso para más información: Consultora de selección de personal para empresas